El acontecimiento inolvidable

Colaboración: Gloria Ardaya

gloria.ardaya@gmail.com

Agradecemos la colaboración desinteresada de Gloria Ardaya quien aportará con crónicas y críticas literarias para deleite de los más exigentes.

Llevo años dándole vueltas a ese acontecimiento de mi vida, nos relata la autora ganadora del Premio Nobel de Literatura en 2022, Annie Ernaux quien en su libro “El acontecimiento” nos revela que todo comienza en octubre de 1963, cuando estuvo esperando por más de una semana a que le viniera la regla. En ese mismo octubre había hecho el amor varias veces con P. Sin embargo, un día se levantó con el estómago revuelto y un extraño sabor en la boca. Fue a la farmacia le dieron Hepatoum, un líquido espeso y verde que le produjo nauseas. Fue al Doctor y confirmó que estaba encinta.

Escribió a P. para decirle que estaba embarazada y que ella no se creía capaz de sostener “eso” o “la cosa esta” en el interior de su vientre.

A lo largo de su relato Ernaux nos relata la sociedad francesa de la década de los 60. Nos menciona que era la primera persona de su familia que estudiaba una carrera. En su búsqueda por deshacerse de “eso” visita a su amigo Jean T. quien la trato con desprecio y la acoso por la confesión que hizo de su embarazo.

Con un tono que mezcla desesperación, enfado, decepción y nostalgia, comenta: “Necesito que esta cosa se vaya”. Comenzó a deambular en búsqueda de médicos que la ayudaran a abortar.

Intentó y buscó maneras de abortar, ella intentó quitárselo, pero fallo y solo se lastimo. Fracasó en encontrar al médico. Se echó a llorar.

A mitad de diciembre cuando sus nalgas y pecho tensaban sus vestidos. L.B. llamó a su puerta y le dio la dirección de la mujer que ella había acudido, una enfermera de cierta edad que trabajaba en una clínica. La señora P.R vivía en un callejón sin salida y cobraba cuatrocientos francos por el aborto.

Un miércoles 15 de enero, nos relata Ernaux sentí un dolor atroz. La mujer me decía: Deje de gritar, pequeña” y “Tengo que hacer mi trabajo”. Tardó tiempo en ponerle la sonda y le había puesto un gran pañal de algodón por si perdía agua.

Me sentía abandonada por todo el mundo. Nos cuenta que salvo por esa mujer vieja vestida con abrigo negro que la acompañaba como si fuera su madre. Al bajar del tren llamó al doctor y este aconsejo que tomara Masogynestril e indico que no debía volver a llamarle nunca más.

El 19 de enero en su habitación de la residencia universitaria empezó a perder sangre. Pensó que iba a morirse de una hemorragia y ya no controlaba nada. Se fue al hospital y nos revela que nadie acudía a atenderla. Despertó a mitad de la noche, miró la hoja colgada a los pies de la cama. En ella aparecía escrito “Útero grávido”.

Ernaux concluye afirmando “No volví a ver nunca más a la Señora P.R y, sin embargo, nunca he dejado de pensar en ella.

La autora obliga al lector a pasar por esa experiencia; nos enfrenta al enfado, a la desesperación, a la decepción, al abandono y, sobre todo a la vulnerabilidad femenina de la década de los 60 en Francia y que, sin embargo, en esta actualidad existen países donde las mujeres aún tienen que verse enfrentadas a esa vulnerabilidad femenina.

Y como menciona Ernaux, ser mujer y “vengar a tu sexo”, ser mujer y no morir en el intento. Ser mujer y asumir responsabilidades que deberían ser compartidas, sin olvidar jamás que tu cuerpo y tu pensamiento te pertenecen. Ser mujer y no declinar, a pesar de vivir sujeta a una sociedad y a una década que penalizan ciertas decisiones con multa y prisión. Ser mujer y sentirte sola, con el único desahogo de un diario y algunas amigas indecisas, que tampoco saben reaccionar. Ser mujer y culparte. Ser mujer y no resignarte al silencio.

Sobre la autora

Annie Ernaux (Lillebonne, 1 de septiembre de 1940) es una escritora francesa, catedrática y profesora de letras modernas, ganadora del Premio Nobel de Literatura en 2022 «por el coraje y la agudeza clínica con la que descubre las raíces, los extrañamientos y las trabas colectivas de la memoria personal».  Su obra literaria es mayormente autobiográfica, y ella misma la considera como un cruce entre la literatura, la sociología y la historia.

Annie Ernaux
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